Etiquetas: botellón, Campillo, fiestas Santiago
Vaya por delante que el verdadero nombre del lugar al que nos referimos en este artículo es "El Paseo de la Herradura", y que por lo tanto en un principio fue ideado para lo mismo que ahora, es decir, para dar agradables y apacibles paseos o para, como mucho, hacer footing por sus largos caminos en forma de elipsis que recuerdan un tanto a la propia herradura con que se nombra el lugar.
Pero la mayoría de jóvenes, y con jóvenes quiero excluir a los actuales adolescentes, lo recuerdan como otra cosa... como un templo del botellón en el que se llevaban a cabo sus primeras fiestas y en el que bebían por primera vez rodeados de sus amigos. La nostalgia nos invade a muchos (incluidos los que ya no bebemos) cuando pasamos por dicho lugar al que ya no se puede acceder por las noches.