Capri, otra cafetería clásica del centro compostelano
Seguimos repasando algunas de las más conocidas cafeterías de la ciudad y hoy toca el turno de hablar del Capri.
Lo cierto es que no es una cafetería que se caracterice por la juventud que se respira en su interior sino más bien todo lo contrario, pero eso hace que allí se respire un ambiente pausado en el que no abundan los ruidos ni los gritos sino que da pie a reflexivas lecturas de prensa o a desayunos relajantes antes de inmiscuirse en el bullicio laboral de la ciudad.
Allí también se televisan algunos partidos de fútbol o eventos deportivos, pero no se viven entre cánticos ni sublevaciones, sino que, como es propio de este bar, se disfrutan de manera pausada.
Se trata de un lugar de reunión para gente que, en general, pasa del medio siglo, lo que no impide como es obvio, que otros de menor edad vayan allí, aunque han de saber que si lo que buscan es jolgorio están acudiendo al lugar equivocado.
En definitiva se trata de un lugar al que acudir si buscas tomar algo tranquilamente, algo que no se puede hacer en todos los sitios y que es una seña de identidad de este lugar, por la que tal vez lleva tantos años abiertos y con una clientela fija.
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Foto – Modestino