El nuevo coche radar de la Policía Local está trabajando a destajo estos días. Así, si ya a principios de la pasada semana este diario le daba cuenta de ello, hay que decir que entre el jueves y el viernes se han vuelto a controlar otros 1.080 vehículos. Los agentes eligieron lugares diferentes cada vez. Así, el jueves, de diez a once de la mañana, se apostaron en la rúa Torreira, de camino hacia el Ponte de O Romaño. Por allí pasaron, en sólo una hora, 270 vehículos pero ninguno de los conductores sobrepasó el límite de velocidad.
A continuación, y en el mismo día, los municipales llevaron su patrulla hasta la Vía Edison, en el polígono del Tambre, en donde ya habían estado el miércoles, y esta vez sí que obtuvieron frutos. De otros 270 automóviles que pasaron por allí se denunció a 16 infractores. El más rápido conducía a 94 kilómetros por hora, si bien le siguieron muy de cerca varios coches más. "Y esto, en una zona llena de rotondas, con camiones estacionados en las aceras y una alta densidad de tráfico, es tremendo", expresaron a este diario algunas fuentes del cuartelillo de la Policía Local.
El pasado viernes el radar también repetía ubicación y volvía a la avenida de Lugo (allí trabajaron el miércoles). Se contabilizaron 477 turismos, y diez personas tuvieron que ser denunciadas al incumplir el código. El fitipaldi, en esta ocasión, pasó a 96 kilómetros por hora. Tras este control, los policías siguieron su jornada y se fueron a la rúa da Estrada. "Vimos 63 automóviles, pero ninguno incumplió la norma".
Fuente: El Correo Gallego.