
Los archivos y bibliotecas siempre nos deparan sorpresas y es que, a pesar del tiempo transcurrido, los estudios realizados y la cantidad de investigadores que existen, hay aún muchos documentos relevantes durmiendo el sueño de los justos en las cajas y estanterías de nuestros centros documentales.
Como ejemplo la noticia que traigo hoy: ha salido a la luz el diario manuscrito de un peregrino a Compostela en 1610.