Ocurre que a veces uno se siente vago pero tiene hambre. O incluso que uno se sintió vago a la hora de ir al supermercado y es domingo y aunque estaríamos dispuestos a cocinar no tenemos alimentos en la nevera y sí un acuciante hambre que nos impide pensar más allá de la comida. Es el momento de telefonear y que alguien nos traiga algo para llenar el estómago…. ¿Nunca os ha pasado?
En Compostela eso ocurre a menudo, sobre todo debido a la cantidad de estudiantes y juerguistas que hay, que matan la resaca con comida de restaurante. Varias son las opciones que existen en la ciudad para ese tipo de momentos y en el presente artículo os las exponemos brevemente para que las tengáis en cuenta a la hora de encargar que alguien lleve comida a vuestra casa.