Raxoi abre la mano con los pubs para intentar frenar las reuniones callejeras
Los locales de copas de Santiago podrán permanecer abiertos una hora más de su horario habitual durante las fiestas navideñas. El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, justificó ayer que ésta es una medida provisional que tiene como objetivo comprobar si de esta forma desciende el número de botellones que se organizan en la ciudad y, con ellos, los problemas que provocan.
«Es un experimento con una finalidad práctica», aseveró el alcalde Sánchez Bugallo para justificar esta ampliación del horario de los locales de ocio, aunque volvió a advertir de que se trata de una medida restringida únicamente al periodo navideño.
La ampliación horaria está impulsada por un grupo de establecimientos compostelanos (unidos en la Asociación de Hostelería Nocturna) que pidió una ampliación en el horario a la Xunta. El departamento autonómico competente remitió, por su parte, esta solicitud al Concello, que «no se opone» a ponerla en práctica.
El objetivo del incremento del horario es, en palabras del regidor, «comprobar sus efectos prácticos, sobre todo, en lo que se refiere al tema del botellón». Así, Bugallo explicó que se escoge para esta iniciativa un «periodo de tiempo acotado (hasta el día 7 de enero), y que no pretende sentar precedentes».
El «marcado componente familiar» y la marcha de los estudiantes por las vacaciones de Navidad son los dos motivos por los que «esta prueba se puede llevar a cabo sin causar grandes trastornos en la ciudad». Además, Bugallo aseguró que en los interiores de los locales «no se suelen registrar problemas» y que en función de los resultados «se estudiarán posibles modificaciones» en las horas de cierre.
Unos cuarenta locales podrán beneficiarse de esta medida. Los hosteleros justifican este aumento de horario al cambio en los hábitos de ocio de sus clientes. Los pubs podrían abrir así hasta las 5.30 horas.
Los vecinos, en contra
Algunos de los vecinos que telefonearon ayer a este diario para denunciar el botellón también protestaron por esta noticia, sobre todo los que viven en la zona vieja.
«Y es que no dormimos sólo por los que hacen botellón, sino por la gente que sale y entra de los locales de copas», afirman. «Si ya no podemos dormir hasta las seis o siete de la mañana, con una hora más, ¿qué nos queda?». «Nosotros tenemos que trabajar también estas Navidades. O nos van a pagar la Xunta y el Concello estos días?», afirman.
Incluso desde la Plataforma contra el ruido, recientemente creada y que aglutina a un conjunto de vecinos afectados por la movida, se comunicó ayer que «nos parece demencial que se les conceda una hora más a los locales y que constantemente se haga caso a las reclamaciones que hace la Hostelería, pero no a las denuncias que día tras día realizan los vecinos del casco histórico», afirman.
180.000 EUROS PARA REPARAR LOS DAÑOS. El alcalde señaló ayer que el Concello se gasta 180.ooo euros al año para reparar los daños que provoca la movida (incluidos destrozos y pintadas). Según Bugallo, esta cifra no tiene nada que ver con la de otros concellos de Galicia, que pueden llegar a gastar «tres millones de euros». Y es que «en general el botellón está formado por estudiantes y no es un colectivo agresivo».
Fuente: El Correo Gallego.
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